Engañifa racista

El gobierno autonómico canario plantea a la Comisión Europea, en su documento de aportación al debate sobre la futura estrategia con las colonias europeas ultraperiféricas (RUP), que estudie "eventualmente la posibilidad de regular" la compra de una segunda residencia en el Archipiélago por parte de extranjeros "durante un tiempo determinado, condicionando la adquisición de las mismas", argumentando que "ante el incremento de la población y su presión sobre un territorio limitado como el de las RUP" sería conveniente "analizar el alcance cuantitavo" de la residencia secundaria para determinar si es necesaria su restricción. Eso sí, la medida no afectaría a los españoles ya que, bajo la actual ficción constitucional, no se les puede considerar extranjeros. Y ya se apresura el paulinato a aclarar que tampoco afectaría a "los nacionales de los estados miembros" de la Unión Europea.

Traducción. Queridos amos: estudien, si les place, prohibir que los extranjeros de los países pobres puedan comprar una vivienda en Canarias. Los blancos y ricos europeos, no problem, my friend.