Algo sin importancia
hasta que mis labios se hundieron
en tu herida,
hasta que la ferocidad
tocó a rebato,
hasta que fuiste como un río
empapándome de gritos
y de plegarias.
“Estimados camaradas descendientes: Cuando hurguen la mierda petrificada de hoy, estudien las tinieblas de nuestros días, ustedes tal vez pregunten también por mí”. .
Curso de valenciano para mujeres inmigrantes
-
La Asociación Por Ti Mujer busca propiciar la integración social y cultural
de las mujeres inmigrantes que viven en l’Horta Sud de València, a través
de un...
VUELOS DE PALMERAS
-
*Vuelos de palmeras*
Sobre el pájaro azul
Y el pez esmeralda
del gigante océano.
Arriba, atento
Los restos
Del ojo pasión
Del satélite.
Sa...
DUERMEVELA
-
La tierra mojada, primero compacta y oscura, se había ido ablandando según
arreciaba la tormenta y se volvía polvo flotante, cuyo tacto blando y
repu...
Casoplón (de muñecas)
-
Tercera casita acabada. Como esta vez me he liado poniendo dos niveles he
decidido no poner chimenea ni luces. Lo que sí he hecho ha sido la
habitación s...
La parranda de la represión
-
"(...) Hacían las fiestas con asadero de carne y mucho alcohol en la finca
del Conde por encima de Pajonales, el chiquillo y yo los vimos subir varias
vece...
La mujer como mercancía
-
*TEODORO NELSON *
*1. EL PATRIARCADO ES UN SISTEMA DUAL. LAS FORMAS HISTÓRICAS DEL
PATRIARCADO.*
Los orígenes del patriarcado se remontan incluso a ant...
No hay comentarios:
Publicar un comentario